domingo, 4 de mayo de 2014

TÓXICOS: UNA AMENAZA SILENCIOSA

    En los últimos 50 años, se han encontrado muchos tóxicos que no conocíamos y que son peligrosos. Estos han sido descubiertos porque han alterado la sangre del ser humano. Por ejemplo, el ftalatos es una sustancia que utilizan para que los plásticos sean flexibles. Otros tóxicos también se pueden encontrar en cosméticos, perfumes, champús.
En la sangre del cordón de los bebes se han encontrado materiales tóxicos, como metales pesados, esto se debe a que la madre ha estado expuesta a materiales tóxicos. Hasta 247 sustancias tóxicas se han encontrado en recién nacidos.

   En algunos sitios, donde hay fábricas, los niños que nacen, tienen algunas problemas, por ejemplo casi todos los niños han necesitado inhalador o son alérgicos a la picadura de mosquito. También hay muy pocos niños que nacen, y madres que llegan ha abortar hasta cuatro veces.
Algunas enfermedades como el cáncer, o simplemente la alergia, el asma, puede que se deba a la contaminación del medio ambiente.

   Con cualquier cosa nos podemos contaminar, por ejemplo: los peces, cuando comen, además de su comida, también comen sustancias tóxicas que se encuentran en el mar, lagos o ríos, y estos luego llegan a nuestro plato.
Los esquimales, tienen muchos más materiales tóxicos que cualquier persona del mundo ya que están expuestas al mercurio, etc. Desde muy pequeños, hay muchos casos de otitis, problemas de escucha y visual, y también ellos tienen más probabilidades de tener cáncer.

   Estos tóxicos están en nuestro alrededor, los PBD están en los pijamas, en los peluches y hasta en la leche materna. Experimentos con estas sustancias tóxicas hacen que las personas sean más hiperactivas. Una concentración del  2 300 000 000 000 sería capaz de alterar el cuerpo, en las ratas provoca cáncer, y una concentración un poco más alta provoca cáncer de próstata, en la ratas.
Hay más casos de cáncer de mama en EEUU, y esto puede estar relacionado con las hormonas en la carne. Canadá y EEUU utilizan y se comen muchas más sustancias tóxicas. También se ha descubierto que el PFOA de los tratamientos anti-manchas y de las cacerolas anti-adhesivas está asociado a efectos en la tiroides y al cáncer.